lunes, 18 de abril de 2016

Cachorrín 2.0

Pues sí, queridas y queridos lectores, definitivamente se nos agotaron las existencias de sentido común en este nuestro hogar, y el Cangués y yo hemos encargado un nuevo cachorrín, porque con la mala vida que llevamos con nuestra querida Cachorrina no nos parecía suficiente, y queremos más, así, como unos yonquis del malvivir paternofilial.

Pero una es mujer de palabra yde honor, como los Gipsy Kings, y siempre dije que si alguna vez tenía un hijo, me comprometía a darle hermanos que le acompañaran en sus aventuras y desventuras en el increible proceso de crecer, aprender y buscar diversión y risas en cada etapa de su vida... y aquí estamos: cumpliendo lo prometido, aunque se me caigan las lágrimas -y el pelo- de pensar en lo que se nos viene encima, solos en esta isla con dos fieras pardas. 

Y aquí el Cachorrín 2.0 trabajando a destajo para fabricarse unos órganos vitales.

Pero, lamentos bolivianos aparte, tengo que reconocer que estamos felices, que morimos de ganas por conocer al nuevo miembro de nuestra pequeña gran familia y verle jugar -y seguramente tirarse de los pelos- con su hermana mayor, por reirnos los cuatro, por volver a llenar la casa de olor a bebé y peleles pequeñitos, por ser uno más en nuestros "Corros de la patata" infinitos, por tener otras manitas regordetas que nos abracen y volver a vivir un montón de primeras veces maravillosas: primeras sonrisas, primeras miradas de reconocimiento, primeros pasitos en los que dejarnos el lumbago de nuevo... En fin, que aunque a una le guste quejarse de maternidad y de pérdida de neuronas y elasticidad y firmeza en la piel, nuestro Cachorrín 2.0 puede estar seguro de que vamos a quererle tanto como a su hermana (que es infinito) y de que vamos a intentar con todas nuestras fuerzas que tenga una vida feliz y llena de risas.

Estamos de 15 semanas, así que no sabemos todavía el sexo del Cachorrín 2.0, pero su hermana dice que es "una niña rosa y se va a poner vesidos de pinsesa", así que como sea varón, a ver quién le explica al maromo por qué le poníamos vestidos con lazos y flores en el pelo. Agárrate que vienen curvas!!


lunes, 11 de abril de 2016

Miedo en el cuerpo

Desde hace ya unos meses, la Cachorrina ha entrado en una etapa maravillosa de su vida: está más graciosa que nunca, juega con todo y con todos, no se calla un segundo, canta a todas horas, se ríe, reparte mimos y abrazos para hacer chantaje emocional y también porque te quiere... Lo que viene siendo que nos la comeríamos con patatas, o sin ellas, porque se nos cae la baba. 
Algo había oído acerca de los dos años y medio, como que a esa edad los bebés cambiaban y empezabas a ver la luz al final del túnel, y la verdad es que con la Cachorrina puedo decir que ha sido así... las rabietas son mucho menos habituales (de 5 ó 17 al día, hemos pasado a una a la semana), entiende perfectamente todo lo que le explicas (otra cosa es que decida obedecer o desafiarte, que una cosa es que las rabietas sean menos frecuentes y otra que renuncie a su edad del pavo prematura -que la tiene, vaya si la tiene-), te da los besos más tiernos del mundo, ríe a carcajadas si juegas con ella... Creo que hemos entrado en la etapa más bonita de su vida, y de nuesra experiencia como padres, y no me importaría que se quedara así unos cuantos añitos. 

Ahora bien, esta nueva madurez de la peque de la casa nos ha traido también nuevas e inquietantes situaciones; preguntas que hacen que se te ericen los pelos de la nuca, cuestiones que dan más miedo que ver el programa de Iker Jiménez sola en una casa vieja con suelos de madera que crujen y a la luz de las velas porque se ha ido la luz. Ahora mismo el top 3 del terror, los greatest hits de "muertamequedoenelsitio", sus preguntas favoritas para helarme la sangre en las venas son:

(Las preguntas hay que leerlas con una vocecilla dulce y chiquitina y acento medio asturiano medio mallorquín que es amor, directamente).
 
1.-  ¿Te ayudo?

Esta cuando más le gusta es cuando me ve con la fregona y el cubo lleno de agua y jabón. En cuanto la escucho me quedo quieta, paralizada en el sitio como una esfinge, esperando que si no me muevo no pueda verme, como el tiranosaurio rex, pero entonces es cuando viene hacia mí rauda y veloz, salvando todos los obstáculos en su camino y al grito de "yoyoyoyoyoyoyo!!!!", a lo que yo sólo soy capaz de imaginar un lago espumoso con olor a pino del bosque en mitad del salón, que tenéis que ver como, aprovechando mi estrategia de inmovilismo, me arrebata la fregona y va dejando un reguero de agua poor toda la casa hasta estamparla en la alfombra. 
En su favor tengo que decir que es muy de ofrecerse para la limpieza en general y que el polvo lo limpia divinamente. La tarea pendiente es la aspiradora, que la pobre se debe pensar que está viva y sale huyendo despavorida en cuanto la enchufo.

2.- ¿Te hago una trenza?

Escalofríos. No digo más. Viene hacia mí con el peine rosa de plástico con forma de corazón de peinar la cola al pony de Minnie Mouse y su mejor sonrisa de "te voy a dejar más guapa que a Elsa la de Frozen", que a una le nublan las neuronas el amor de madre y se deja arrancar mechones de pelo y rizar el rizo hasta hacerme rastas, y después dejo que me atuse el pelo y me lo azote como la melena de Carmina Ordoñez, que me arrea unas bofetadas de efusividad que me deja tibia. Pero luego me dice que estoy guapísima, como una princesa y que le cante "Let it go" y me da una abrazo que pienso que no puede quererse más. Y dejaría que me hiciera trenzas o encaje de bolillos con la melena.

3.- ¿Jugamos a ésto?

Dice con la caja de costura en la mano, o señalando el horno, o acercándose a coger los cuchillos del lavavajillas, o poniéndose de pie en el cabecero del sofa, que ella es muy de emociones fuertes. Sudores fríos y palpitaciones. Ahí lo dejo.